Penúltima jornada de la liga infantil
Foto de familia, en la que se ve toda la Intendencia y Personal de Apoyo que supone una jornada de Liga Infantil ( y eso que no salen los 5 coches aparcados en la Rotonda del Teatro de El Bosque)
Pues jugaban nuestros chavales contra el Virgen de Atocha A, un equipo que nos sacaba 2 puntos en la clasificación y digo bien, sacaba…
Saltándonos casi todos los preliminares, (la manera tan especial que tenemos de seleccionar los jugadores que tienen que jugar cada ronda, los líos de «en que mesa juego» etc), sólo destacar el espíritu de compañerismo que demostró Mario cediendo su puesto en la primera partida a Jesús «que nunca había podido jugar dos partidas seguidas en ningún encuentro» Un gesto que le honra a Mario. Jesús se hizo acreedor a la confianza y cumplió, al igual que Rubén y Paco que ganaron sus partidas y de manera convincente. Hay que pulir alguna cosilla a mi juicio, ¡pero que le vas a decir a un chaval que ha ganado! ¡Si ha ganado es porque lo ha hecho bien! ya veran que eso se puede matizar, pero será dentro de unos años, me temo.
En cuanto a Marcos para mi gusto fue la mejor partida aunque perdiera. Apuró su tiempo y jugó un final de caballo contra peones muy bien, contra un rival muy duro. Perdió por alguna imprecisión pero a veces las mejores partidas no son las que se ganan, sino de las que se aprende, como creo que ha hecho en esta jornada nuestro primer tablero. Resultado final 1-3 a nuestro favor.
En el encuentro de vuelta, pintan bien las cosas para nuestros intereses. Su primer tablero tiene que irse por lo que juegan nada más que tres rivales. Pues ahora entra Mario a jugar, se queda fuera Marcos por ser el único en perder (a veces esta ley no escrita que tenemos es cruel, pero alguien se tenía que quedar fuera) y entre los 3 que nos quedan, de nuevo los dedos. Sumamos 18 deditos y al hacer el rondo, se queda fuera Rubén, eso sí, ganando por incomparecencia.
Se juega la ronda muy rápido y con tanta velocidad cae en una trampa Jesús, en muy pocas jugadas recibe mate. Había que ver el truco, pero cuando se va deprisa, el paisaje pasa rápido y no vemos los baches… No pasa nada, la primera partida estuvo bien. Y en cuanto a Mario y Paco, vuelven a ganar, también rápido y con soltura. A pesar de ese empate a 1 momentaneo y de la velocidad imprimida a las partidas, no pareció peligrar el encuentro en ningún momento, de hecho volvimos a repetir el resultado de 3 a 1, con lo que con los 6 puntos sumados afrontamos la última ronda en el colegio Villalkor por encima de la mitad de la tabla, con opciones de quedar entre los 5 primeros clasificados. Pues así quedan relatadas las andanzas de este equipo, que coincide con el mío de tercera, que nos estrenamos el domingo en Los Rosales, contra un rival duro y lleno de adultos como es el Sierra Norte A, que vienen de Bustarviejo ni más ni menos, a medirse contra nosotros. Veremos si los hados nos son propicios, y si San Empanadillo nos echa una manita
P.D. No fue San Empanadillo el de la manita. Nos la echaron los rivales clavándonos un 5-0. ¡Ya crecerán los chavales ya!